Depresion Postparto
¡Qué
tema! Hay varios artículos que hablan acerca del tema. Aun así me animo a
hablar acerca de esto… que según ya no es un tema tabú y que las personas están
“informadas”.
Yo en lo personal creo que no todas las
personas están tan bien informadas como creen. Suponen que por saber que esas
personas no están locas, que es
meramente hormonal o por otro tipo de razón, ya saben todo lo que deberían
saber y pueden seguir con su vida normal. Sin evitar comentarios negativos,
críticas y “abandono”. Quizá no tengan mucho tiempo de hacer visitas o no
tienen idea de qué decir en qué momento – por lo tanto van por el lado
sencillo. Simplemente no hacer nada.
Desde
la adolescencia he tenido algunos síntomas de depresión que iban y venían.
¡Pero nada comparado con esto! El hecho de ser tan extremadamente bendecida con
una bella y sana bebe, debería ser motivo suficiente para no caer en este tipo
de depresión. Es muy frustrante sentirse triste y sin ganas de vivir, teniendo
alguien al lado que necesita de ti para sobrevivir. Contradiciéndome por el
hecho de que no quiero hacer nada con la bebe. ¡Qué genial seria si el viento
pudiera cambiarle el pañal, alimentarlo, cuidarlo, entretenerlo! ¡Pero no se
puede! Por lo tanto hay que buscar ayuda y encontrar la salida. ¡Eso es lo
importante – buscar ayuda y no sentirse avergonzada al respecto! Yo aún no encuentro
completamente la salida. Es un tema complicado pero ya voy en el
camino correcto.
Muchas veces me he preguntado: ¿Qué
hacían las personas en épocas pasadas al respecto? Probablemente no tenían
mucha información ni apoyo. Sin dejar al lado el hecho de que tenían que
trabajar muy duro (lavar la ropa a mano y algunas señoras hasta ordeñaban
vacas). ¡En fin! ¿Cómo le habrán hecho para encontrar un motivo para vivir? ¿O
eran tan fuertes física y emocionalmente que tenían la suerte de no tener que
pasar por esto?
(La imágen la tomé de Google, por lo tanto no tengo idea en dónde está ubicada la clínica)
Estas palabras las escribo con el fin
de que todos reflexionemos acerca de las personas a nuestro alrededor… ¿hay
alguna pareja que hace poco tuvo un bebé? ¿O tuvo otro bebé? ¿Los papás
necesitan ayuda o un poco de ánimo? En mi caso, los demás decían saber que
conocían por lo que estaba pasando pero no hacían nada al respecto y eso me
produjo mucho coraje, que al sumarlo con la depresión empeoraron las cosas. ¡De
corazón espero que haya podido animarles a percibir emociones de otras
personas, tener la sensibilidad de tratar de ayudarlos en la forma que puedan y
quizá lograr que alguna nueva mamá o papá tenga un día genial! Aunque no lo
creamos – una sonrisa, un mensaje, una llamada, un detalle, una visita puede
alegrar un día. ¡Es muy triste vivir así!
Desde el Corazón…
de una ¡Mujer!
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