Depresión Posparto - Parte 2

   Hace unos meses escribí acerca de la depresión posparto y me pareció importante volver a tocar el tema.

   Mi niña tendrá 18 meses pronto y todavía estoy luchando con la  depresión.  Hace unos meses fui al doctor por algunos problemas de salud, pero no tuve el valor para contarle en qué hoyo tan profundo me encontraba. Lo bueno es que tuve que regresar para un chequeo y fue entonces cuando le comenté mis síntomas. Con verdadera preocupación me escuchó. Tuve que contestar un formulario con preguntas. Desde entonces he mejorado mucho. ¡Ahora sé que puedo pedir ayuda y la voy a recibir! Al igual que también voy a recibir un poco más de comprensión de algunas personas. ¡Las personas que están pasando por algo similar...  mutuamente nos vamos a apoyar y seguiremos adelante!!

   Escribo esto por si alguien está en la misma situación que yo y no sabe qué hacer. ¡Para hacerte saber que no estás sola! Te animo a que no te quedes callada y se lo cuentes a alguien que le tengas confianza. ¡¡Que NO te de vergüenza!! Porque los que han pasado por la depresión, entenderán. Los que no la conocen, quizá juzgarán pero es porque no tienen idea de lo difícil y horrible que es. Si con el tiempo todo sigue igual o hasta empeora, sería bueno buscar ayuda médica.

Estos son algunas síntomas de la depresión posparto:
- Cansancio, fatiga.
- Sentir que es fastidioso o demasiado trabajo cuidar a tu bebé.
- Tener ganas de llorar todo el día, llorar mucho o llorar por cualquier cosita.
- El trabajo de la casa te parece demasiado complicado o no tienes ganas de hacerlo. (Ej. Limpiar, hacer comida... )
 - Ganas de dormir todo el día, dormir mucho o no lograr dormir. Que no puedas descansar.
- Falta de apetito o muchas ganas de comer todo el día. Ansiedad.
- Te enojas y/o te sientes lastimada con facilidad.
- Te fastidia estar sola con el bebé o preferirías poder estar sola. Tampoco quieres estar con personas.
- Pensamientos de querer suicidarte.
- Pensamientos de querer hacerle daño al bebé.
- Nada te parece divertido. Se te hace difícil poder sonreír o ver el lado positivo de la vida.
- Preocupación extremada por el bebé. No poder dejarlo con alguien para que puedas salir sola.

                                                              Desde el corazón de una mujer...


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