"LAS CUCHARAS"
Hace poco leí un
artículo que a mi me pareció muy interesante y que explica adecuadamente lo que
ahora estoy viviendo. Se llama "las cucharas":
Dos adolescentes estaban en una cafetería
disfrutando de su tiempo libre. Isabela saca de su bolsa pastillas que siempre
toma antes de la comida. Su amiga Michelle la mira pensativa y le pregunta:
"¿Cómo se siente tener tu enfermedad?" Isabela sorprendida por la pregunta, no está
segura de qué responder. Está consciente que la amiga quiere una respuesta
sincera. Después de pensar por mucho rato... Se le ocurre la mejor manera para
explicarlo y recoge todas las cucharas que hay en la cafetería. La amiga
asombrada se ríe, porque cree que será otra de las tantas bromas de su querida
amiga. Isabela regresa a su lugar y empieza a explicar: "¿Vez todas estas
cucharas que tengo aquí?" La amiga dice que si. "Éstas son todas las
cucharas que tengo; no le puedo agregar más. Con cada actividad que hago
durante el día, le tengo que ir quitando una cuchara." Michelle la mira
confundida. "Te explicaré un poco mejor... ¿Qué haces en las mañanas
cuando te despiertas?" La amiga responde que se levanta y se alista para
ir a la escuela. Isabela responde: "Bueno, ahí acabas de gastar alrededor
de 5 cucharas. Gastas una cuchara al tomar la decisión de levantarte de la
cama; otra al vestir y peinarte. La tercera al preparar desayuno y desayunar.
La cuarta al ir a dónde quieras ir o empezar algún trabajo." La amiga
sigue sentada con asombro... Y dice: "¡Se te acaban rápido las cucharas en
un día!" "Así es"
responde Isabela "es por eso que tengo que escoger sabiamente mis
actividades. Si hago cena, no me alcanzan "las cucharas" para limpiar
y lavar los trastes después de un largo día de estudio/trabajo. A veces tengo
que decidir entre ir a tu casa o limpiar mi cuarto. Es por eso que no voy tan
seguido a tu casa."
Desde ese día su amiga la pudo entender
mejor e Isabela supo explicarle su situación a otras personas.
(Los nombres fueron inventados)
Ese ejemplo también aplica a mi vida
diaria. Parece que cada movimiento lo tengo que hacer conscientemente para no
gastar en vano mi energía... ¡Si amanezco con dolor, "las cucharas"
desaparecen sin darme cuenta!
En la mañana muchas personas se levantan,
preparan algo delicioso para desayunar y después lavan los trastes. Ven que el
piso está sucio y en una nada terminan de limpiarlo. Es un corto ejemplo lo que
para algunas personas es una rutina "normal". Logran hacer muchas
cosas, todos los días. Yo tengo que elegir entre, si quiero preparar huevos
revueltos para el desayuno y lavar los trastes pero limpiar el piso después o
hacer un desayuno sencillo, lavar los trastes y poder limpiar el piso. No puedo
hacer las actividades agotadoras una después de la otra, necesito descansar
primero.
Parece que no logro hacer lo que para
otras personas (o la mayoría) es algo normal. ¡Eso a veces me frustra mucho! El
sólo hecho de hacer comida o cena, me agota por completo.
Pero entiendo que el propósito de Dios
para mi no es precisamente lograr hacer lo que las demás amas de casa hacen...
¡Mucho menos compararme con ellas! Digamos que tengo otras cosas importantes
que hacer... Considerando que hacer el trabajo con una niña juguetona es más
complicado y con cada actividad gasto "dos cucharas".
Estoy segura que hay otras personas que
pasan sus días así. Conscientes y cuidando cada trabajo, para no cansarse
demasiado y terminar el día todos cansados y frustrados. También sé que para
otras personas esto probablemente les suena ridículo. Aquellos que no sabían,
les comparto la información & para los que están batallando ¡¡les mando un
fuerte abrazo!!
Desde el corazón de ¡¡una mujer!!
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